El Cisne vive gracias a “La Churona”
La pequeña parroquia de El Cisne, enclavada a 2.440 metros sobre el nivel del mar en el sector Chayalama del monte Fierrohurco o cerro de hierro, sobrevive gracias a la devoción por La Virgen de El Cisne.
“La Churonita” sin quererlo es el motor que impulsa la economía local, porque hasta un 70 por ciento de sus pobladores se dedican al turismo relacionado con la fe católica.
En sus estrechas calles como la García Moreno o Nicanor Roberto Aguirre se ubican decenas de negocios, distribuidos a lo largo y ancho, principalmente de comida para saciar el hambre de los miles de creyentes, los recuerdos religiosos o posadas para pasar la noche.
Augusto Viñansaca, nativo del lugar, tiene un puesto de recuerdos justo a la entrada del Santuario Basílica Nuestra Señora de El Cisne, iglesia de estilo gótico que domina el panorama de la pequeña parroquia con sus tres naves en un área de 1.800 metros cuadrados, con 75 metros de largo, 40 de ancho y 45 de alto, cuya construcción inició en 1934.
Viñansaca reconoce que en El Cisne todo gira en torno a “La Churona”. El comercio se dinamiza con los miles de fieles que acuden de julio a septiembre y con esto logran el sustento para la familia.
Esto a pesar de la dura competencia, porque como su negocio hay decenas en un pequeño espacio de la plaza del Centro Histórico. Son cientos los artículos que oferta y todos alusivos a la Virgen, desde los más comunes, como llaveros, crucifijos, cadenas, escapularios, hasta los menos comunes como réplicas exactas de la venerada imagen.
Los precios también son variados, dependen mucho de la demanda y oferta. Por ejemplo, con un buen regateo consigue hasta cuatro escapularios por un dólar. La Virgen de tamaño original se la puede encontrar desde 15 hasta 50 dólares, depende del material con la que fue fabricada.
“Después de septiembre, cuando inicia, clases todo queda muerto”, indicó.
Peregrinos
Ayer, en vísperas de la fiesta que organiza el comité Quince de Agosto, que tiene su sede en Cuenca, miles de peregrinos llegaron hasta El Cisne. La mayoría lo hizo en buses de transporte interprovincial, otro tanto en vehículos pequeños y un grupo menor tras cumplir la travesía descalzos, soportando condiciones adversas como el frío, el fuerte viento que por estas fechas hasta mueve los árboles y hace tambalear hasta a los más vigorosos.
El tramo final de más de 100 gradas es cubierto con apuro hasta ingresar a la iglesia que no da abasto para enorme cantidad de personas. Las misas programadas a cada hora están siempre llenas. Ahí, los creyentes dejan escapar sus emociones más íntimas en una comunión entre su fe y sus propósitos cumplidos.
El sacerdote Carlos Yunga rememora que en el año 2013, según las estadísticas que dispone, fueron dos millones las personas que visitaron el Santuario; ahora la tendencia es que los fieles acuden desde julio.
Desde ayer las celebraciones son mayores, incluso la imagen de “La Churona, estará expuesta en el Campo Mariano.
El comité Quince de Agosto organiza la fiesta con show, música y juegos pirotécnicos. Ya cumplieron con la primera jornada de actividades con ofrendas a la Madre Santísima, como la llaman.
Tres vestidos fueron entregados al sacerdote Armando Jiménez para vestir la imagen, uno color turquesa donado por un devoto de Gualaceo, Manuel Quiñónez, residente en los Estados Unidos, otro color rojo y blanco entregado por Lourdes Pillco y un tercero de chola cuencana que lo ofreció Miguel Rocano.
Milagros
A decir de los creyentes, los milagros concedidos son múltiples y como muestra de agradecimiento están los miles de recuerdos que dejan los fieles.
Según el padre Carlos Yunga, recientemente fue testigo de un testimonio milagroso; ocurrido con un migrante que fue diagnosticado con cáncer terminal, quien visitó el Santuario y se encomendó a “La Churona”. A su retorno a los Estados Unidos cesaron los dolores y cuando acudió a su médico le dijeron que estaba curado y que no tenían explicación lógica. “Él vino y dio su testimonio en el altar frente a todos los feligreses”, indicó Yunga.
Fuente: Diario El Tiempo