China sospecha que Estados Unidos introdujo el virus en su territorio.
Un portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores chino insinuó en Twitter que el nuevo coronavirus, que apareció en China, podría haber sido introducido por el ejército estadounidense.
Zhao Lijian mencionó esta hipótesis el jueves por la noche, retomando así las teorías del complot que circulan por internet.
Al comienzo de la crisis, el director del centro chino para el control y la prevención de enfermedades declaró que el coronavirus apareció en un mercado de la ciudad de Wuhan (centro).
Pero en las últimas semanas, Zhong Nanshan, un especialista chino en enfermedades respiratorias y veterano en la lucha contra la epidemia del Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SRAS, 2002-2003) ha planteado la posibilidad de que la fuente del virus causante del COVID-19 no se halle en China.
Una hipótesis retomada por Pekín.
En su tuit, Zhao Lijian publicó un video del director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos que declara ante el Congreso que se descubrió que algunos estadounidenses que se creía que habían muerto de gripe eran portadores del nuevo coronavirus.
“Los CDC pillados en delito flagrante. ¿Cuándo apareció el paciente cero en Estados Unidos? ¿Cuántas personas han sido infectadas?”, escribió Zhao.
“Es posible que haya sido el ejército estadounidense el que trajo la epidemia a Wuhan. ¡Estados Unidos debe ser transparente! ¡Y debe publicar sus datos! Estados Unidos nos debe una explicación”, soltó.
Zhao Lijian no se basa en ningún estudio científico. El viernes se limitó a tuitear enlaces a dos artículos del sitio web Global Research, conocido por difundir tesis de conspiración.
Según algunas de las teorías que circulan por las redes sociales chinas, la delegación estadounidense de los Juegos Militares Mundiales, una competición disputada en octubre en Wuhan, podría haber traído el virus a China.
Las autoridades chinas fueron acusadas de ocultar la epidemia en sus comienzos. La policía de Wuhan reprendió a los médicos que habían dado la voz de alarma en diciembre.
Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha elegido deliberamente un nombre para la enfermedad de COVID-19 que no menciona ningún país en particular, Washington suele usar términos relativos al origen “chino” del coronavirus.
El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, lo llamó “el virus de Wuhan”. Una expresión considerada “despreciable” por el ministerio de Relaciones Exteriores chino.
Más de 130.000 personas han contraído el coronavirus, de las cuales casi 5.000 han muerto.
FUENTE: REVISTA VISTAZO
R.A