Justicia indígena en Molleturo.
El hecho se registró el fin de semana en la comunidad San Pedro de Yumate, perteneciente a la parroquia Molleturo. La comunidad consensuó el castigo y lo aplicó.
Reparar el corazón enfermo de ambición de un ciudadano acusado de robo, fue la motivación que tuvieron los habitantes de la comunidad de San Pedro de Yumate, Molleturo, para aplicar la justicia indígena el reciente fin de semana.
El sábado 7 de marzo el ECU 911 conoció que en el sector de Molleturo tres pasajeros de una camioneta de transporte mixto que se dirigía al sector de Tamarindo, presuntamente, robaron en dicha comunidad. Tras una persecusión uniformados de la Policía los interceptaron en el sector del Cruce de Jesús María.
Los agentes verificaron que en la camioneta habían maletas y tres costales en cuyo interior había rocas, presuntamente material aurífero. Por ello los agentes aprehendieron a Manuel Mesías G. de 46 años, a Julio Rodrigo D. de 56 años y al adolescente J. H. G. de 17 años, quien fue aislado.
Mientas tanto, los habitantes de San Pedro de Yumate implicaron a un cuarto sospechoso quien fue sometido a un proceso de justicia indígena ante la presencia de policías “para evitar que existan desmanes y violación a los derechos humanos”, según señala un informe emitido por la comunidad.
Para lograrlo establecieron la denominada asamblea comunitaria de justicia, cuyo proceso de juzgamiento fue guiado por un Yachak de la zona “respetando los derechos humanos y colectivos de la persona detenida”.
Finalmente, la sentencia que se dictó consistió en el arrepentimiento público del presunto delincuente, baño de agua fría en una caída natural de agua, limpia con ortiga y otras hierbas y disculpas al pueblo de Molleturo.
Luego del cumplimiento de la sentencia el pueblo invitó al procesado a un desayuno para luego retirarse con la promesa de no volver a realizar estas acciones y volver a cultivar la tierra.
Adicionalmente se dio cumplimiento al acuerdo comunitario de que cualquier vehículo que sea encontrado realizando actos delictivos será incendiado. Los tres ciudadanos restantes fueron puestos a órdenes de las instituciones judiciales ordinarias.
FUENTE: DIARIO EL TIEMPO
R.A