La prioridad para D. Cuenca es el DT Tabaré Silva
El entrenador uruguayo Tabaré Silva se puso al frente del Deportivo Cuenca el martes 2 de junio y después de 146 días su continuidad es prioritario para la dirigencia del equipo colorado.
Arribó a la tienda sin ningún colaborador suyo. No puso reparos para arreglar con la dirigencia y se adaptó a los jugadores y ellos respondieron tanto fuera como dentro de la cancha. Cuando tomó las riendas del club, el Deportivo Cuenca era décimo con 19 puntos, puesto en el que se ubicó con el exentrenador Luis Soler.
Cuatro meses y 24 días después, el uruguayo aparece como el de mejor rendimiento en esta temporada -antes estuvieron Soler y el interinazgo de Jerson Stacio-. A falta de una fecha para que culmine el certamen, Silva ha conseguido el 53,85 por ciento de efectividad.
Disputó 13 encuentros con el Deportivo Cuenca y sumó 21 unidades de 39 posibles. Sus delanteros marcaron en 17 ocasiones y la defensa vio caer su pórtico en 15 oportunidades.
Juan Serrano, dirigente del equipo cuencano, días atrás explicó que la prioridad es buscar la continuidad del estratega de 44 años. “De allí armaremos el equipo para la siguiente temporada. Nosotros queremos que Tabaré siga en el club”, apuntó.
Sin embargo, en última la rueda de prensa del entrenador -luego de la victoria 1-0 sobre Liga de Quito el pasado sábado-, contó que su representante está en la ciudad y se reunió con los dirigentes del equipos.
“Vino mi representante y estamos lejos de arreglar la renovación, veremos qué pasa los próximos días, si se arregla o sino estos serían mis últimos partidos con en Cuenca. Siempre estaré agradecido por haberme permitido trabajar”, comentó.
Estos días serán claves para cerrar o descartar la negociación del entrenador Silva, quien dará una lista de jugadores que continuarían en el equipo y de los futuros refuerzos para la próxima temporada.
Esta es la tercera vez que Silva conduce en el país, en el 2015 dirigió al Deportivo Quito y un año después se hizo cargo de Sociedad Deportiva Aucas. Antes de llegar al Cuenca tuvo un paso por el Real Garcilazo, de Perú. (D).
Fuente: El Tiempo.