Las Mascaradas reviven viejos recuerdos
Vicente Tello, Daniel Pinos, Francisco Cisneros y Víctor Arévalo recibieron un reconocimiento por parte de autoridades de la Universidad del Azuay la tarde de ayer.
Los recuerdos inundan la memoria de algunos de los cultores de la fiesta de Mascaradas de Cuenca. Anécdotas, historias, personajes y otros elementos que dieron vida a esta tradicional fiesta que hoy tendrá su edición 34 impulsada por el Amistad Club y la Unión de Periodistas del Azuay.
La historia se remonta mucho antes del 1982, año en el que este club dejó de participar con sus comparsas y pasó a coordinar la actividad cultural.
Así comenta Daniel Pinos, gerente concesionario de Radio Cuenca y uno de los impulsores de esta celebración. Pinos, de lo que recuerda, en los años 50 la gente de los barrios, amigos y familias, salían a las calles “a hacer bromas, chistes o inocentadas”.
Fue en ese punto que él junto a otros amigos que también eran amantes de esta tradición, como Vicente Tello, Carlos Abad Romero, Antonio Argudo y Galo Orellana, decidieron organizar un concurso y presentar las representaciones sobre tarimas en diferentes escenarios de la ciudad. Producto de este movimiento y por la existencia de la revista Mascaradas, Pinos le dio el nombre a la celebración de Disfraces o Mascaradas. Así lo ratificó Luis Chiriboga, vicepresidente del Amistad Club, quien desde 1982 ha participado activamente en la organización de esta actividad.
Pinos agrega que el concurso nace por las “disputas” de los disfrazados por demostrar quién tenía la mejor representación, por lo que cada barrio, familia o persona, buscaba destacarse.
Fuente: El Tiempo
SC