“Eli” Bravo sigue con el sueño olímpico intacto
Si la azuaya Elizabeth Bravo, tiene planificado entrenar hasta el último día de su embarazo y retornar días después del nacimiento de su primogénito, lo cumple. Es que la voluntad inquebrantable de la mejor triatleta del Ecuador es a prueba de todo.
Muestras dentro de la pista hay muchas. Para seña, en julio estuvo a 17 segundos de subirse al podio panamericano en Toronto. En su vida cotidiana hay más, cuando al siguiente día del fallecimiento de su Señor Padre (+), se presentó a las exigentes rutinas de la piscina olímpica, sin dejar de cumplir el cronograma.
Ahora, que a su decir espera una “bendición” junto a su esposo y entrenador Francisco Tirado, tiene una aliciente más para llegar a lo que serían sus segundos Juegos Olímpicos, ahora en Río de Janeiro.
“Mi actual estado no cambió en nada mi planificación del 2015, ya que cumplí con el número de competencias establecido con resultados que avalan que vamos por el camino correcto”.
Sobre la clasificación a Río de Janeiro señaló que se mantiene al igual que en el 2014, siendo la mejor opcionada para alzarse con el cupo de Nueva Bandera (simulación olímpica).
“El nacimiento de mi pequeño está para los primeros días de enero, por lo que dado el caso analizaremos si competir en las Copas Panamericanas que abren el 2016, a razón del colchón de puntos con respecto a las rivales que vienen de atrás”. “Eli” dijo además que de no peligrar su posición en Nueva Bandera su retorno internacional sería para abril, siendo a mediados de mayo la fecha tope para conocer la lista de inscritas para la cita cumbre del año entrante.
Sostuvo que tras la recategorización de atletas del Plan del Alto Rendimiento del Ministerio del Deporte continúa en el rango “B”. “Me parece muy positivo que cada seis meses se evalué, porque nos obliga a mejorar, entiendo que habrá otro análisis tras Río de Janeiro”.
Bravo, próxima a cumplir 29 años, comentó que a dos meses del alumbramiento entrena entre cuatro a cinco horas, con su esposo en ciclismo y atletismo y hasta en la natación, ya que si bien el profesor Juan Fernando Enderica elabora los planes, Francisco controla los tiempos y corrige las falencias físicas.
Casos
El caso de la coterránea no es aislado ni de lejos, por citar el de la británica Jessica Ennis-Hill, medalla de oro en heptatlón en Londres 2012, que siguió entrenando durante los nueves meses de gestación, o a la maratonista norteamericana Karen Cosgrovequien, que mantuvo una carga de entrenamiento de 100 a 130 kilómetros por semana hasta el noveno mes. (DOU) (D).
Fuente: Diario El Mercurio.