Caída de avión ruso genera versiones contradictorias
Han surgido distintas informaciones y teorías sobre cuáles pudieron haber sido las causas de la caída del avión ruso, el sábado pasado, sobre la península de Sinaí con 224 personas a bordo. Versiones que en vez de esclarecer han generado nuevas interrogantes.
Las teorías que se barajan hasta el momento van desde un ataque con misiles, la explosión de una bomba a bordo, la posibilidad de una falla estructural de la nave o un error humano.
Mientras sigue la búsqueda de cuerpos en la región desértica del Sinaí, los expertos empezaron a analizar las cajas negras del avión. “Esto podría ser un proceso largo y no podemos hablar sobre los resultados mientras la indagación está en curso”, sostuvo ayer Mohamed Rahmi, portavoz del Ministerio de Aviación Civil de Egipto.
Algunos expertos en aviación plantean la posibilidad de que a bordo del Airbus hubo una bomba. Metrojet, la compañía propietaria del avión, descartó que el accidente pudiera deberse a fallos en los equipos o a un error humano.
Mientras, Estados Unidos, Alemania y Gran Bretaña emitieron alertas en el Sinaí. Aconsejan a las aerolíneas evitar volar sobre la península por debajo de 8.000 metros y evitar el aeropuerto Sharm el-Sheij debido a la violencia extremista y, en particular, el uso de armas antiaeronaves.
El presidente de Egipto, Abdel-Fatá el-Sisi, insistió ayer en que la situación en la península del Sinaí estaba “totalmente controlada” y que las afirmaciones del grupo Estado Islámico de haber derrumbado el avión eran ‘propaganda’ destinada a dañar la imagen del país.
En tanto, Alexei Smirnov, del Ministerio de Emergencias de Rusia, informó que 140 cuerpos y más de 100 restos humanos fueron repatriados a San Petersburgo en dos aviones. (I)
Version oficial
31 de octubre
Egipto y Rusia descartan la reivindicación del Estado Islámico (EI) de haber derribado el avión ruso en el que murieron 224 personas.
Se recuperan las cajas negras.
1 de noviembre
El jefe de los expertos aeronáuticos que participan en la investigación, Viktor Sorotchenko, dice que el avión se había “roto en el aire”, lo que explica que los restos quedaran esparcidos en una zona de 20 km².
2 de noviembre
El jefe de la Inteligencia de EE.UU., James Clapter, consideró ‘improbable’ que el EI cuente con los medios para derribar un avión comercial en vuelo.
La compañía rusa Metrojet informa que el avión cayó debido a factores externos y que la desintegración en el aire no se debió a “ningún fallo técnico o error de pilotaje”.
3 de noviembre
El Ministerio de Aviación Civil de Egipto informa que no hay evidencia para probar que el avión se partiera en pleno vuelo.
Otras versiones
31 de octubre
Un responsable de la autoridad de control del espacio aéreo en Egipto señaló, bajo anonimato, que el capitán del Airbus A321 se había quejado de un problema técnico en el equipo de comunicación y dijo que quería hacer un aterrizaje de emergencia, antes de perder contacto con los controladores aéreos.
El Estado Islámico (EI) afirmó en Twitter haber derribado el avión ruso que se estrelló en el Sinaí, en el este de Egipto, causando la muerte a 224 personas.
2 de noviembre
Una fuente en el comité que analiza las cajas negras de la aeronave señala que el Airbus A321 no registró un impacto en el exterior y el piloto tampoco realizó una llamada de auxilio antes de desaparecer del radar.
3 de noviembre
La cadena estadounidense CNN, citando a un funcionario estadounidense bajo anonimato, informó que un satélite militar de EE.UU. detectó un destello de calor sobre el Sinaí (Egipto) en el momento del accidente.
Fuente: El Universo