Preocupan descargas en los ríos de Cuenca

Técnicos ambientales revisan desde ayer el alcantarillado de las zonas aledañas al puente sobre el río Machángara que conduce a Ricaurte, ya que en la zona se registraron descargas de un líquido rojizo que preocupa a las autoridades. A este caso se sumó ayer la descarga de un líquido azul en el río Tarqui a la altura de Guzho.

La directora de la Comisión de Gestión Ambiental, CGA, Catalina Albán, informó que las descargas sobre el río Machángara no corresponden a las fábricas legalmente establecidas en la zona del Parque Industrial. En el caso del río Tarqui los técnicos de la CGA aún analizan de dónde provino el líquido.

De acuerdo a Albán, “al parecer las sustancias son tintes que se disiparon en el agua y puede que no sean mayormente dañinos”. No obstante, los técnicos de la entidad en coordinación con personal de la subgerencia ambiental de la empresa municipal ETAPA analizan la flora y fauna de la zona para descartar una posible contaminación.

Medidas
La CGA y ETAPA inspeccionan las conexiones de un colector ubicado en el sector de la descarga en el río Machángara, temen que conexiones clandestinas de fábricas no autorizadas estén desbordando su capacidad.
El concejal Carlos Orellana, quien preside la Comisión de Ambiente del Cabildo, indicó que ETAPA viene cumpliendo con un “arduo trabajo” para evitar la contaminación de los ríos, por lo que este tipo de afectaciones deben recibir sanciones más fuertes.
El edil propone una actualización a la ordenanza de gestión ambiental en las riberas para evitar que estos casos queden en la impunidad. Con la normativa se fortalecerá el trabajo de las comisarías ambientales y se coordinarán acciones con la Fiscalía Ambiental para endurecer los castigos, aseguró.

Denuncias
El concejal y la directora de la CGA coinciden en que las denuncias deben ser mucho más oportunas para poder detectar a tiempo las fuentes de las descargas. “En el caso del río Machángara la denuncia nos llegó demasiado tarde, cuando llegamos al lugar el agua había disipado la sustancia rojiza y nos fue difícil establecer su origen”, dijo Catalina Albán.
Orellana pide a la ciudadanía que haga denuncias públicas que permitan la actuación inmediata de la CGA “utilizando la tecnología”, es decir a través de las cuentas de las autoridades en las redes sociales. Las denuncias también pueden registrarse a través del 911.
“No tenemos 20.000 personas para vigilar los ríos, nuestros ojos son la ciudadanía” dijo Catalina Albán, quien pidió mayor apoyo de la ciudadanía tanto para evitar las descargas como para denunciar posibles casos de contaminación. (JPM) (I)

Fuente:  El Tiempo