Mundo: El tiempo apremia a Suecia para interrogar a Assange
Suecia lucha contra el reloj para interrogar a Julian Assange, refugiado en la embajada de Ecuador en Londres desde hace 3 años, para evitar que a mediados de agosto prescriban los delitos de agresión sexual de los que se le acusa.
La fiscalía sueca esperaba poder entrevistarse en junio o julio con el fundador del portal WikiLeaks, responsable de la filtración de miles de documentos secretos estadounidenses, pero las diferencias de procedimiento entre Suecia y Ecuador lo han impedido.
“Soy crítico respecto a la posición de Ecuador”, declaró a la AFP Claes Borgström, abogado de una de las denunciantes. “No podemos decir que hayan ayudado a Suecia a interrogar a Assange”.
Su clienta es una de las 2 mujeres suecas que acusaron al australiano de agresión sexual en agosto de 2010, un delito que prescribe cinco años después de los hechos en base a la legislación sueca. Por este motivo, Borgström teme que se abandone la investigación preliminar sobre estas acusaciones próximamente.
La otra demandante acusa a Assange de violación, un delito cuyo plazo de prescripción es de 10 años, por lo que el caso no se cerrará en agosto.
Sin embargo Assange, de 44 años, no está imputado formalmente de ningún delito.
El australiano, sobre el que pesa una orden de detención europea emitida por Suecia, niega los hechos y afirma que las relaciones fueron consentidas. Asimismo, rechaza viajar a Suecia para declarar por miedo a ser extraditado a Estados Unidos, donde teme ser condenado a muerte por las revelaciones de WikiLeaks.
Petición tardía
Para desbloquear la situación, la fiscalía sueca anunció en marzo que aceptaba finalmente interrogar al activista en Londres, donde vive recluido en la embajada ecuatoriana desde junio de 2012.
Aunque el mes pasado envió una petición formal a Quito para mantener un encuentro con Assange en “junio o julio de 2015”, no ha ocurrido nada desde entonces.
“La petición llegó muy tarde y está siendo tratada por Ecuador, que seguramente dirá que sí tras haber seguido sus propios cauces”, explicó a la AFP Per Samuelsson, el abogado sueco de Assange. Este último “no piensa en términos de prescripción. Es inocente, por lo que quiere ser interrogado lo antes posible”, aseguró.
Samuelsson descartó que Quito actúe con mala voluntad. “Es falso afirmar que Ecuador busca ralentizar el procedimiento. Incluso el presidente (Rafael Correa) dijo que quería que el interrogatorio tuviera lugar”, añadió.
Interrogado por el diario británico The Guardian, el exjefe de la diplomacia ecuatoriana, Ricardo Patiño, criticó la actitud sueca. “No encuentro aceptable que […] esperen que el papel de Ecuador se limite a la apertura de las puertas de su embajada”, dijo al rotativo la semana pasada.
Fuente: Diario El Telégrafo