Hace cuatro años, Turia Pitt era una prometedora modelo de 23 años que participaba en un maratón benéfico en Kimberley, pero se declaró un incendio que truncó parte de su vida y que la dejó con un 65% de su cuerpo quemado. Su novio de toda la vida, Michael Hoskin, estuvo con ella sin ver las secuelas del siniestro y ahora le propuso matrimonio. Es una historia de amor que demuestra que realmente es posible estar, haciendo alusión al dicho, “en las buenas y en las malas”.

Después del accidente, Pitt tuvo una larga convalecencia, en la que trató de superar las secuelas físicas, pero sobre todo las emocionales y psicológicas. Él no se separó de su lado, llegando incluso a abandonar su trabajo como policía para poder acompañarla en su mejora.

Pitt en total ha recibido más de 200 operaciones. Recuperó la sonrisa, aprendió a aceptarse a sí misma e incluso a demostrar que se puede seguir con la vida, pese a este tipo de tragedias. Hoy la joven da charlas, visita a víctimas de incendios e incluso compite en maratones y es conocida en el mundo por su historia.

Pitt está por dar el “sí quiero” a Michael, quien le pidió matrimonio con el mismo anillo que había comprado cuatro años atrás, cuando ella se encontraba en el hospital.

“Soy una persona con mucha suerte al poder irme a dormir cada día con un hombre como mi novio. Yo sé que cada día que me despierto a su lado es un gran día”, expresó Pitt al diario Daily Mail de Australia.